“A principios de esa semana tuve una discusión con un paciente terminal del hospital, que se enfrenta al final de su vida. Hablamos de tu muerte y de tu música, y después de numerosas cuestiones que no siempre son fáciles de discutir con alguien que se enfrenta a su propia desaparición. Tu historia, de hecho, se convirtió en la forma de comunicarnos abiertamente sobre la muerte, algo que muchos médicos y enfermeras se esfuerzan por hacer”.
“Lo que han hecho durante el tiempo que rodea tu muerte ha tenido un profundo efecto en mí y mucha gente con la que trabajo. Tu último álbum, lleno de referencias, consejos y alusiones... He oído lo meticuloso que eras, por eso sé que el hecho de que tu muerte coincida con el lanzamiento de tu álbum no es, probablemente, una coincidencia. Todo estuvo planeado para convertirse en una obra de arte de la muerte”.
En casa, no en el hospital
Taubert continúa su carta explicando cómo Bowie ha contribuido a desmitificar cuestiones sobre la muerte: “la gente cree que ocurre predominantemente en los hospitales, en los entornos clínicos. Usted eligió su casa y este es uno de nuestros objetivos en los cuidados paliativos, que otros vean sus casas como una opción en estos momentos. Las fotos que se publicaron unos días después de su muerte, que se ha dicho que son de sus últimas semanas de vida, parecían desafiar a todos los monstruos que rodean a la imagen de esos últimos momentos”.Pero, no es casualidad. El médico hace de la muerte de Bowie el hilo conductor para reclamar formación e inversión en cuidados paliativos: profesionales que ayuden al control de síntomas, que alivien el dolor, las náuseas, los vómitos, la dificultad para respirar… “Profesionales que mitiguen, también, cualquier angustia emocional que pueda haber tenido”.
Estas, unidas a las instrucciones de no tratar de reanimar a una persona enferma terminal si entra en parada cardiorrespiratoria, por ejemplo, son las líneas básicas de la actuación de paliativos, la verdaderamente humana y digna manera de enfrentarse a la enfermedad.